A principios del siglo XX,fué destinado al regimiento de artillería de Cuatro Vientos José Sanchiz de Quesada, marques de Vasto, conde de Piedrabuena y Villamina.La figura historica mencionada fue concoida en la localidad surema de Madrid denominada Alcorcón como Marques de Valderas (Esr calificativo se origino por estar casado con Isabel Arróspide y Alvarez, Marquesa de Valderas).
Hacia el año 1916 compró unas fincas próximas a su regimiento y mandó construir unos «castillos» para vivir con su familia.
Los edificios fueron encargados al arquitecto Luis Sainz de los Terrenos.
El palacio principal, de estilo sajón se inauguró en 1917. Al lado, construyó otros dos más pequeños, siendo uno de ellos dedicado a capilla particular bajo la advocación de San José, y otro destinado a la servidumbre y las caballerizas.
El marqués de Valderas fué un gran benefactor del municipio realizando numerosas obras beneficas:
Financio en 1919 la instalación eléctrica.
Financio en 1925 las primeras dos aulas escolares.
Facilitó en 1935 los terrenos necesarios para la conducción del agua potable.
Además subvencionó los primeros equipos de fútbol de la localidad.
Por todas sus memorables aciones fue nombrado hijo adoptivo y alcalde honorario perpetuo de Alcorcón.
Tras el fallecimiento del marqués, el edificio tuvo varios usos, siendo el más destacado el uso que le dio la congregación hermanas del amor de dios, quienes lo usarón como colegio mientrás finalizaba la construcción de uno propio.
A finales de la década de 1960, el conjunto quedó abandonado y poco a poco se fue deteriorando.
Hacia la década de los años 80 los castillos estaban en un estado ruinoso.
En 1988, el VI marqués de Valderas, Hipólito Sanchiz y Núñes-Robles, donó los castillos al Municipio de Alcorcón.